lunes, 19 de agosto de 2013

RCN sin suerte / El otro lado

 

¿RCN será un canal sin suerte? Si suerte es tener rating, anda en baja. Si suerte es tener talento, hay mucho pero maltratado.

En RCN hay talento pero lo desprecian: Allá te espero, su mejor telenovela, la que nos recuerda los buenos tiempos y se mete con las ambigüedades de nuestra identidad de sobrevivientes, esa que nos gusta, esa que reconocemos por su calidad en libretos, actuación y realización, esa obra es la más maltratada, ya está a las 10 de la noche, y todo para dejarle espacio a la poca gracia de El día de LA suerte y el desabrido Protagonistas. RCN sí tiene talento, solo que lo desperdicia.

El gran Héctor Lavoe y su ritmo endiablado nos pone a cantar, pensar y bailar “Pronto llegará el día de mi suerte. Sé que antes de mi muerte. Seguro que mi suerte cambiará” y más adelante “Esperando mi suerte quedé yo. Pero mi vida otro rumbo cogió. Sobreviviendo en una realidad. De la cual yo no podía ni escapar”. Y dice “Ahora me encuentro aquí en mi soledad pensando qué de mi vida será”. Filosofía popular, existencial y sabrosa.

Pero llegó RCN y la convirtió en recochita, obviedad y gritería. Bueno, dirán que no se basa en Lavoe y que por eso se llama El día de LA suerte: no es un mi, es un la.

El día de LA suerte se basa en que para hacer humor hay que gritar, sobreactuar, hacer muecas y diálogos de cuentachistes.

Y para que todo sea más obvio, aquí está Leonelo: el que no cupo en la selección de Caracol y que por pura casualidad se llama y habla y viste como Leonel Álvarez; chabacanería costeña que vuelve y juega al desprestigio caribe: todos gritan, todos mofan, todos se exhiben en clave de grotesco; sonsera de vecindario cachaco para maldad de montaña: donde hay familia con hijo bueno y gemelo perdido.

Y todos con problemas. Y todos con suerte. Y claro, como son pobres, cuando se ganen la platica se convertirán en un chiste nacional.

Y no es problema de talento. Esta telecomedia es dirigida por el que más sabe de eso: don Mario Ribero; los actores son recursivos y buenos, hay sexis que muestran carnes, hay actrices que buscan actuar, hay Rubiano y Meneses repitiendo papel, la pareja de libretistas Baquero e Infante antes habían hecho decencias. Uno pensaría que todo podría funcionar porque ahí hay talento.

Pero no funciona porque todo parece una imitación torpe de Sábados felices y un suave-sex. Todo se queda en veremos: faltan tonos más sutiles y ambiguos en la actuación, diálogos menos chistosos y más de situación, escenas más cotidianas que generen humor por sí mismas y no por la sobreactuación o el chiste.

Lo que sí tiene RCN es mucha suerte: maltrata a su mejor programa Allá te espero y este, sin embargo, le marca bien; su Prepago resucita con buen rating; Protagonistas no cuaja pero ahí va entre los 5 primeros; El día de LA suerte pierde hasta con noticiero… pero nada importa porque como no hay sino dos canales: RCN queda de sub-campeón. Eso es tener LA suerte de ser monopolio.


ÓMAR  RINCÓN
Crítico de televisión 


Tomado de:

No hay comentarios:

Publicar un comentario